En museografía, los diseños trabajan en conjunto al poner en escena las diversas historias que constituyen nuestra identidad y nuestra cultura. Cada exposición, cada museo tiene su propia historia, un guión museográfico y una puesta en escena. Se trata de construir momentos memorables.

 

El trabajo de diseño con memoria es fundamental, la identidad de las comunidades se construye sobre la memoria colectiva. Sobre algo más que la suma de recuerdos.

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Las exposiciones presentan colecciones y de esta manera construyen o reconstruyen la memoria a partir del lugar, los objetos y la dimensión gráfica del relato. Los escenarios finalmente bañados por la iluminación se funden en un recorrido donde los visitantes leen mientras caminan. Toda la experiencia forma parte del lenguaje expresivo museográfico. La museografía es una experiencia preñada que regresará al visitante y le permitirá construir su memoria.